miércoles, 23 de marzo de 2016

UNA DE PRINCESAS

Hoy he recibido por WhatsApp un artículo sobre como influyen las princesas y príncipes de las películas Disney en nuestra sociedad y no me he podido resistir a dar mi opinión sobre este tema.

Que es la siguiente:

Pero que nos pasa? estamos locos!!!!

Las princesas siempre serán princesas...con su palacio, su corona, su madrastra, y con la única preocupación importante en su vida... que le quiten el trono.

Pero porque trasladar esas banalidades a la vida real? No lo entiendo.

Creo que hay que dejar ese hueco a la imaginación, porque la realidad ya es bastante dura...y cuando eres niño no necesitas saberlo...eso ya te lo ira enseñando la vida. (que profunda me he puesto no?)

Porque sinceramente, a mi no me hubiera gustado que de pequeña me dijeran que, a Cenicienta después de la muerte de su padre la mandaron a un orfanato a que se buscará la vida, ni que Blancanives murió de inanición en el bosque, o que Elsa a pesar de sus poderes murió de frio en su palacio de hielo o que la bella durmiente tuvo la mala suerte de ser encontrada por promotor inmobiliario sin esceupulos que quería recalificar los terrenos abandonados por su familia y no le importó tirar su lecho a un punto limpio... queda mucho más literario imaginar, que queda un ápice de bondad en los malos del cuento o que te les dejaron a los protagonistas la posibilidad de cambiar su destino, vamos que no veo mal que nos den algo de esperanza, porque si desde pequeños leemos que si te sale algo mal no hay posibilidad de levantar cabeza, por lo que no existirían los optimistas en el mundo y aunque a mi personalmente algunas veces me saquen de mis casillas, hay que reconocer que en muchas ocasiones hacen una gran labor social.

Sí, admito que esas versiones de los cuentos de toda la vida pueden ser machistas, demasiado edulcoradas y que marcan unos roles que se pueden quedar en el subconsciente de por vida, pero creo que también aportan unos valores que estamos perdiendo.

Cómo:

La valentía, el honor y el sentido del deber....  porque pensarlo bien, por mucho que seas el príncipe azul si la misión que te plantean fuera más negra que la guarida de Ella la araña... Quien no se la pensaría?

- Mira guapito de cara, veras es que tengo una hija, monisima por cierto, que andaba sola por el bosque, sin escolta ni nada, si ya ves tengo un ejército pero mi hija vaga por el mundo sin una espada que la protega...bueno, pero eso es otro tema...(si el rey también divaga).
Vamos que iba sola y se la llevó un dragón de treinta toneladas que echa fuego por la boca, ácido por los ojos y que tienes unas escamas imposibles de atravesar con un arma, que te parece te animas? Es una muerte segura...pero si vuelves te podrás casar con ella aunque no te hayas visto ni en foto.

Quien diría a eso que si, nadie en su sano juicio.

Pues nuestro príncipe va y dice que si, porque sabe que sin sacrificó no hay honor y que aunque no lo consiga su valentía hará que siga vivo en la memoria de la sociedad durante generaciones y que además desde pequeño todo el mundo le ha dicho que salvar princesas era su trabajo y a mi personalmente este análisis de la situación de encanta, si vale es absurdo y hace aguas por todos los lados, pero es tan romántico, tan imposible... que me gusta leer esas cosas simplemente porque no pasan en la vida real.

Esa es la verdadera razón por la que a mi edad me sigo emocionando cuando le leo a mi hija Peter Pan, Blancanives y los siete enitos porque Maléfica es mi mala favorita,  y además no he dejado de leer literatura fantástica, porque a mi cuando la vida me da un palo me apoyo en las historias imposibles que leo en los libros y cuentos y pienso no en el conjunto de la historia sino en los pequeños detalles.

En como Buttercup,  de La Princesa Prometida, sonreía cuando escuchaba decir a su amado "cómo desees", cuando la mano de San salvo a Frodo de morir calcinado en el Monte del Destino, Beren echando en cara al padre de su amada el poco valor que le daba a la vida de su hija, al capitán del Holandés Errante regresando a la orilla de la playa a ver a su amada...y así mil historias más que se me vienen a la mente...

Así que puetos a trasladar la fantasía al mundo real yo prefiero quedarme con el siguiente mensaje :

Si ellos tuvieron esos golpes de suerte, momento de gloria o pequeñas recompensas a su sacrificio porque a nosotros no nos puede pasar también ?

1 comentario:

  1. Nada más que añadir, lo has clavado en todo ;) Tenemos que montar el Malefica's club de fan jajaja!

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